Análisis de Lion: ¿Tiene posibilidades de ganar el Oscar?

El filme dirigido por Garth Davis cuenta con 6 nominaciones a Los Oscar, incluyendo mejor película y mejor guion adaptado. Su historia y su capacidad para emocionar ha impactado a muchos y ha conseguido que el pequeño Sunny Pawar sorprenda a todos por su interpretación.

La brillantez de “Lion” está en su fuerza y en la forma de su narración. Dispone de dos partes: en la primera se cuenta la historia de Saroo, el protagonista del film, de pequeño y como es el proceso de su traslado de India a Estados Unidos. En la segunda parte de su metraje se nos muestra a un chico agradecido por todo lo que tiene en la actualidad, pero con muchas ganas de conocer su pasado.

“Lion” tiene muchos puntos positivos y que demuestra su fortaleza para poder ganar. Es un largometraje con aroma a clásico, fácil de ver y que agradará a todo tipo de espectador. Todos los años, muchas de las películas nominadas a Los Oscar se caracterizan por su complejidad y por lo innovador que puede resultar el proyecto, pero este año el rumbo podría cambiar. “Lion”, al igual que “Figuras Ocultas” y “La La Land” son filmes con poco aroma a novedad, aunque cuentan con una ejecución extraordinaria y su fuerza radica en su sencillez. El arte por hacer de manera magistral y diferente algo que hemos visto muchas veces puede hacerla vencedora. Además, este tipo de dramas e historias gusta mucho en los académicos.

Sin embargo, cuenta con algunas debilidades que pueden complicar sus opciones de ganar. En primer lugar, destacan la irregularidad de sus tramos. Su primer acto es bastante superior al segundo y la sensación de haber visto historias similares otras veces hace que su factor sorpresa sea nulo. Tampoco cuenta con multitud de nominaciones y, desde “Argo” (2012), no gana una película que no esté nominada al Oscar por su dirección. Además, este es un año con mucho nivel: “La La Land”, “Manchester Frente al Mar” y “Moonlight” cuentan con una gran parte de comentarios positivos mientras que “Lion” ha sido la peor valorada por la crítica especializada, con solo un 69 sobre 100 en “Metacritic” frente al 99 de la cinta dirigida por Barry Jenkins.

Moonlight: emoción en estado puro

“Moonlight” se presenta como una historia novedosa que puede recordar en algunos aspectos a “Boyhood” (2014), aunque su argumento no tiene nada que ver, puesto que la película de Barry Jenkins cuenta la construcción de una identidad a través de un drama social en el que se tratan muchos temas que hacen de este film una joya con igualdad de brillantez en todas sus piezas.

La originalidad del film encabezado por Mahershala Ali radica en su forma en la que está contada, en su perfecta ejecución. “Moonlight” es de esos largometrajes que, si no fuese por la fuerza de los Oscars, jamás habría llegado a nuestro país, tal y como pasó con la ópera prima de su director, “Medicine for Melancholy”, inédita en España.

Pese a ser una obra pequeña, con bajo presupuesto y con actores poco conocidos, Barry Jenkins logra hacer una cinta inmensa que sobrepasa la pantalla y que logrará emocionar y hacer sufrir al público. La historia que plantea es bastante dura, pero su director evita caer en el sensiblerío. En su lugar, nos regala una pieza audiovisual con una gran belleza y planteando una historia que no muchas veces se ha visto en el cine.

Se dice que “Moonlight” es una especie de “Boyhood” negro y gay, cuando en realidad es mucho más que eso. Quizá no llegue a la brillantez del drama de Richard Linkater, pero no le hace falta. La película es detalle, pasión, una experiencia emocional única y en la que no te vale de nada saber su argumento, puesto que lo que logra transmitir es mucho mayor de lo que cualquier papel puede impregnar.

Con el paso del tiempo puede convertirse en una obra maestra. Es una pena que surjan pocos largometrajes así. “Moonlight” ha conseguido que se haga muy larga la espera del siguiente proyecto de Barry Jenkins. Quizá, su propuesta minoritaria no le juegue a su favor en los Oscars, pero no importa. El film ha superado con creces todas las expectativas. No dejes que te la cuenten y ve a verla al cine.

Valoración: 4,5/5

Lo mejor: Las brillantes actuaciones y su delicadeza

Lo peor: Que por su dureza solo pueda llegar a un público muy minoritario

Crítica de "Manchester Frente al Mar": Un drama duro y minoritario con aroma de Oscar

Con 6 nominaciones a los Oscar, “Manchester Frente al Mar” es una de las candidatas a llevarse la estatuilla que la corone como el mejor largometraje del 2016. Para entender el último trabajo protagonizado por Casey Affleck, hay que hacerse a la idea de que estamos ante un drama poco convencional y que puede no gustar a todo el mundo.

Los primeros minutos del filme son confusos, el espectador no entiende cuál es el origen de los hechos que se están produciendo, pudiendo llegar a aburrir en algunos momentos. Sin embargo, una escena de la cinta cambia todo su transcurso y transforma a “Manchester Frente al Mar” en un drama humano y bastante duro.

Lo más destacable de la película es el impecable trabajo de Casey Affleck. Con multitud de cambios de registro, demuestra ser un actor de lo más versátil y uno de los mejores del momento (quizá su hermano Ben deba aprender un poco de él). Se establecen conexiones en todo momento con los protagonistas de la película, aunque quizá no todas las que se deberían. Hay escenas demasiado largas, que le aportan poco ritmo al largometraje, y las frases de Lucas Hedges sacan un poco de contexto puesto que intentan aportar comedia cuando no hay lugar para ella, consiguiendo que el espectador se quede frío en muchos momentos.

“Manchester Frente al Mar” es un film de relaciones, pero no nos permite que empaticemos con sus personajes y que conozcamos su verdadera historia. La relación entre Michelle Williams y Casey Affleck no acaba de quedar clara, dejando algunos cabos sueltos de cara a su final.

Al último trabajo de Kenneth Lonergan tras las cámaras le falta algo más de acción en su conjunto y provoca que el espectador se quede con la extraña sensación de si no se podría haber contado lo mismo con 40 minutos menos de metraje.

Valoración: 3/5

Lo mejor: La brutal interpretación de Casey Affleck.

Lo peor: Algunas escenas sacadas de contexto y la sensación de que se podría haber contado y transmitido lo mismo en mucho menos tiempo.

Crítica de "Lion": emoción y calidad humana en estado puro

Crítica de “Lion”

El film de Garth Davis relata una historia entrañable que hará emocionar al espectador y cuenta con la interpretación magistral del pequeño Sunny Pawar

Enero y febrero son sinónimos de temporadas de premios. En estos meses, llegan a la cartelera española muchas de las brillantes joyas que han triunfado entre la crítica de Estados Unidos y que están dispuestas a arrasar en los Estados Unidos y los Oscar. El primer trabajo de Garth Davis en la gran pantalla trae como resultado un film emotivo y que gustará a todo tipo de espectador.

Para disfrutar correctamente de “Lion”, hay que tener en cuenta que no estamos ante una película de temática sorprendente y novedosa. Por tanto, su brillantez radica en su narrativa, la forma en la que está contada. Son dos largometrajes en uno. En la primera parte se cuenta la historia de Saroo, un niño de cinco años, encarnado magistralmente por un sobresaliente Sunny Pawar, quien consigue traspasar la pantalla y, gracias a su carisma, la cinta funciona mucho mejor. En la segunda, tenemos la oportunidad de observar la que puede ser la mejor interpretación de la carrera de Dev Patel.

“Lion” es un auténtico caramelo visual. Es una obra absolutamente conmovedora que hará emocionar al espectador. Logra enganchar desde el primer momento con escenas muy bien resueltas. En su segunda parte, esa brillantez se desinfla en algunos momentos, con demasiados flashbacks y soluciones un tanto previsibles, lo que hace que se convierta en un producto un tanto irregular, descompensado por ambas partes. Su primera hora de metraje es exquisita, pero le sobran algunos minutos, al contrario de lo que pasa en la segunda, que se queda demasiado corta y consigue que nos quedemos con más ganas de ver a un Dev Patel totalmente entregado a la causa.

A pesar de algunos fallos, “Lion” es una película con aroma de clásico e increíblemente conmovedora. Puede dar la sorpresa en los Oscar, aunque lo tiene un tanto difícil. Muchas veces se nomina si el personaje gusta, pero no se tiene en cuenta si el actor es merecedor del premio o no, como pasa en este caso con Nicole Kidman, una brillante intérprete con un papel muy lucido pero con muy poco peso para obtener una nominación a mejor actriz de reparto. Veremos lo que ocurre en la gala del próximo 26 de febrero.

Valoración: 4/5

Lo mejor: La magistral clase de interpretación que nos brinda Sunny Pawar.

Lo peor: Cierta irregularidad en su conjunto.

La La Land: el musical que triunfa y que te hará bailar y disfrutar

Con solo tres películas, Damien Chazelle ha conseguido convertirse en una joven promesa de Hollywood. En “Whiplash” nos trasladó a una historia ambiciosa y que nos brindó la mejor interpretación de toda la carrera de J. K. Simmons y ver a un Milles Teller en un asombroso cambio de registro.

Con “La La Land”, el director lo ha vuelto a conseguir. El largometraje es un culto a la nostalgia, un tributo a los musicales clásicos. Parte de una historia que no es muy original y que nos puede recordar a otros filmes del mismo género, pero Chazelle logra darle su toque personal para que la cinta no sea otro musical más.

La principal causa por la que “La La Land” funciona es gracias a su potente banda sonora. Todas sus canciones son maravillosas, pegadizas y una melodía que hará deleitar el paladar de todos los aficionados a este género cinematográfico.

Ryan Gosling y Emma Stone. Esta pareja, con una química brutal, hacen que salten las chispas desde el minuto uno que salen en escena y consiguen que nos enamoremos con su historia. La película es un musical trasladado a los tiempos modernos que, a la vez que hace bailar al espectador, reflexiona sobre el mundo del cine, del espectáculo, el cómo poder salir adelante siendo tú mismo y sin traicionar tus principios. “La La Land” va de eso y hace que al espectador se le caigan las lágrimas ante ciertas escenas que, sin duda, ya forman parte de la historia del cine contemporáneo.

Con el paso del tiempo, el largometraje se convertirá, sin ninguna duda, en un referente del género. El film es brillante en su conjunto, aunque su segunda parte es ligeramente superior a la primera. Quizá, su guion no sea nada del otro mundo, pero la química, la chispa y las ganas de reivindicar consiguen hacer de “La La Land” una cinta excelente y que, sin duda, ha llegado para ser recordada.

Valoración: 4/5

Lo mejor: La historia de amor entre Emma Stone y Ryan Gosling.

Lo peor: El espectacular número inicial saca un poco de contexto y no tiene nada que ver con lo que vemos en el resto de la obra.