lunes, 28 de noviembre de 2016

Crítica de "Sully"

Crítica de “Sully”

En su último largometraje, Clint Eastwood nos transporta a una historia emocionante y humana con un Tom Hanks sobresaliente en su papel

La nueva película de Clint Eastwood cuenta la increíble historia del “Milagro en El Hudson”, suceso que ocurrió el 15 de enero de 2009, en el que el piloto Chelsey Burnett Sullenberg aterrizó un avión en el río Hudson sin que hubiese ninguna muerte.
El film cuenta con unos efectos especiales impresionantes y que harán que te metas mucho más en la cinta. Clint Eastwood busca, a través de su nuevo trabajo, que los espectadores reflexionen acerca de lo que ocurrió en este caso, de cómo a un hombre que salvó a 155 personas le acusan de no hacer lo correcto. El largometraje es una oda a la humanidad, a la bondad y a la manera tan mecánica pero poco humana de trabajar de la sociedad actual.
“Sully” alterna los momentos del accidente con lo sucedido después, y lo hace de una manera que engancha desde el primer momento hasta el último. No estamos ante un guion espléndido, pero sí que es lo mejor que ha hecho Eastwood desde “Gran Torino” (2008).

En la película sobresale una persona por encima del resto, y ese es Tom Hanks, quien nos ofrece una interpretación magistral. “Sully” es una cinta que huele al Óscar, no solo por su parte técnica, sino por su poder de contar la historia en una hora y media con toda precisión de detalles sin caer en el aburrimiento o en la monotonía. Eastwood podría haber caído en lo dramático o, incluso, en lo sensacionalista, pero sabe que es lo que le interesa al público saber de la historia.
Sin duda, el film tiene un cierto aroma a Vintage y recuerda a los largometrajes que se hacían años atrás y que tan bien funcionaban en la gran pantalla.

Valoración: 4/5
Lo mejor: Tom Hanks y sus efectos especiales.

Lo peor: Parece que Eastwood ha perdido su capacidad de sorpresa.

jueves, 24 de noviembre de 2016

Crítica de "100 metros"

“100 metros” es una película necesaria para hacer que más gente conozca la enfermedad esclerosis múltiple, y para descubrir una historia que es un gran ejemplo de superación y de lucha constante. Sin embargo, hay algunas cosas que no acaban de encajar en el nuevo largometraje dirigido por Marcel Barrena.
Si el film hubiese durado mucho menos, se habría contado lo más esencial y el resultado sería increíble. El problema de “100 metros” es que contiene muchas tramas innecesarias y que le restan calidad al producto final. Su principal fallo es que, el personaje interpretado por Karra Elejalde, es demasiado exagerado y consigue que las situaciones no sean muy creíbles en muchos momentos. El personaje de María de Medeiros no aporta nada a la trama y provoca que en las escenas en las que ella sale rocen el ridículo.

A pesar de la entrega y del gran esfuerzo que ha hecho Dani Rovira para interpretar a Ramón Arroyo, el actor malagueño está más acertado en los roles cómicos que nos tiene acostumbrados que en esta ocasión. Es destacable el gran trabajo que hace la brillante Alexandra Jiménez, donde demuestra, una vez más, sus dotes interpretativas y que puede hacer el papel que se proponga.
Las partes cómicas de “100 metros” son necesarias para quitarle dureza al asunto, y quizá esto sea uno de los puntos positivos de la cinta. También es muy interesante ver el cambio que sufre el personaje de Dani Rovira, y cómo el deporte le ayuda a volver ser feliz. Las escenas del protagonista en el hospital junto a otros enfermos de esclerosis múltiple son lo mejor del film, puesto que hacen emocionar al espectador y que comprueben las distintas claras que puede tener esta enfermedad.

Valoración: 2,5/5
Lo mejor: La interpretación de Alexandra Jiménez.

Lo peor: Su falta de ritmo en muchos momentos.

lunes, 21 de noviembre de 2016

Crítica de "Ouija: El origen del mal"

La película “Ouija” (2014), basado en el terrorífico y popular juego de Hasbro, se vendió como una cinta que daba bastante miedo, pero que resultó ser uno de esos trabajos que, en vez de asustar, provocan carcajadas por lo absurda que es su situación, protagonizada por unos adolescentes, siendo un recurso demasiado utilizado en los filmes de este género.
Sin embargo, con su secuela no pasa lo mismo. Pese a no aportar nada nuevo al cine de terror, “Ouija: el origen del mal”, cuenta una historia que poco tiene que ver con la anterior. Esta vez, la situación da bastante miedo y provoca escalofríos en muchos momentos, sobre todo en el último tramo del largometraje, marcado por un final inesperado y que deja al espectador intranquilo y con sensación de malestar. Estamos ante una rara situación, ya que la segunda parte supera con creces a la primera.
En esta ocasión, las imágenes son muchos más impactante y hay sobresaltos con más frecuencia. Bien es cierto que la idea es más propia de un cortometraje de 30 minutos, debido a que la película tiene muchas escenas de relleno. Quiere meter dramas familiares y situaciones amorosas que provocan que no se acabe de crear un clímax total de terror y que no haya momentos de tensión hasta que ha entrado en su mitad. El susto tarda en llegar, pero cuando aparece lo hace con fuerza y mucha.

“Ouija: el origen del mal” es una cinta bastante entretenida e ideal para pasar una tarde/noche de fin de semana, pero que no aporta nada nuevo. Si te gustan los filmes de miedo inteligentes y psicológicos, lo mejor será que no vayas a verla, puesto que lo único que busca es provocar el susto fácil del espectador a través de un guion que sobresale por encima de otros trabajos con características similares, como el de la reciente “Nunca apagues la luz”.

Valoración: 3/5
Lo mejor: Su inquietante final.

Lo peor: Pese a su intento, no aporta nada nuevo al cine de terror.

jueves, 17 de noviembre de 2016

Crítica de "Que Dios nos perdone"

El pasado 28 de octubre se estrenó en las salas españolas la segunda película de Rodrigo Sorogoyen, quien vuelve a ponerse detrás de las cámaras después de la excelente “Stockholm” (2013). Desde que salió su primer tráiler en abril de este año, prometía ser uno de los thrillers más impactantes de este año, y desde luego no estábamos equivocados. 2016 está siendo glorioso para el cine español, y “Que Dios nos perdone” se ha convertido en uno de los mejores films del año, cosechando excelentes críticas, pese a que algunos críticos, como Mirito Torreiro, la consideran demasiado sensacionalista. Además, se llevó en el Festival de San Sebastián el premio al mejor guion y se ha convertido en una de las favoritas de los próximos Goya.
Su principal éxito se debe a su estructura narrativa. Está relatada de una manera que, en ningún momento, parece que sea una historia de ficción. Los personajes y las situaciones que ocurren son muy realistas, hasta un punto que da miedo.
Su guion es impecable y que permite que te metas en la historia desde el primer momento y que no desconectes ni un solo segundo. Todo lo que ocurre es impredecible, no te puedes imaginar lo que va a suceder en la siguiente escena. A pesar de su extensa duración, 127 minutos, no le sobra ni un solo fotograma. Todo lo que rodea a “Que Dios nos perdone” es absolutamente imprescindible. Pese a que sus imágenes son bastante duras, desagradables y pueden incomodar al espectador más sensible, son necesarias, puesto que no se recrea en ellas y no las muestra sin justificación alguna.

Mención aparte se merece su brillante elenco. Roberto Álamo está sobresaliente, con un personaje bastante difícil con el que otros hubiesen caído en la exageración, pero que él defiende como buen profesional que es. Mención aparte se merece Antonio de la Torre quien, probablemente, se encuentre ante el mejor papel de su carrera, con una tartamudez perfecta y con la que se reafirma como uno de los grandes. Realmente, este año los académicos lo tienen muy complicado con él, puesto que su papel en “Tarde para la ira” también fue excelente, al igual que toda la obra en su conjunto.

Rodrigo Sorogoyen ha vuelto a demostrar que sus trabajos están llenos de calidad y nos ha dejado con muchas ganas de que estrene una nueva cinta pronto. A pesar de “Que Dios nos perdone” está pasando desapercibida por la taquilla, víctima de la resaca de la fiesta del cine, ha logrado convertirse en una película de obligada visión para todos los cinéfilos y que, con el tiempo, puede convertirse en un clásico. Una vez más, el cine español demuestra que los prejuicios que van asociados a él están más que injustificados, puesto que puede ofrecer títulos de calidad igual o superior a la de otros países.

Valoración: 4,5/5
Lo mejor: La interpretación de Antonio de la Torre y los personajes secundarios que aparecen en el film.
Lo peor: Que obras como estas sean escasas.

lunes, 14 de noviembre de 2016

Crítica de "Verano en Brooklyn"

Ira Sachs ha demostrado, en anteriores ocasiones, que sabe acercarse de una manera impecable a los conflictos que rodean a los personajes. Su visión es siempre tierna y sabia a la hora de ahondar en las desgracias que ocurren en la vida cotidiana.
El director de títulos como “El amor es extraño” (2014) nos regala otra obra maestra. Sachs demuestra que se puede hacer una gran película con muy poco y con una historia aparentemente sencilla que consigue complicarse y convertirse en una auténtica delicia. “Verano en Brooklyn” cuenta la historia de cómo los problemas y decisiones familiares acaban salpicando y afectando a dos pequeños que mantienen intacta su inocencia.
El largometraje logra transportarnos a nuestra infancia, a recordar a los primeros amigos que tuvimos y nuestras salidas a los 13 años de edad. Uno de sus puntos positivos es la brillante interpretación de los dos niños protagonistas, sobre todo la de un magistral Michael Barbieri que demuestra ser un gran actor y tener muchas posibilidades de cara a un futuro. Él es quien encabeza la que quizá sea la mejor escena de “Verano en Brooklyn”, donde demuestra sus habilidades en una divertida clase de interpretación.

La cinta, mediante un tono de comedia dramática, nos plantea la trágica historia de la pérdida de la inocencia a través de un conflicto entre las familias de Jake y Tony, los dos niños de la película, que pone en peligro su amistad. A través de un guion excelente firmado por su propio director y Mauricio Zacharias, Sachs nos cuenta una historia de una forma en la que no resulta deprimente, haciendo que nos enamoremos de algunos personajes y nos desencantemos de otros y consiguiendo que el espectador se plantee si algunas decisiones merecen realmente la pena.

Valoración: 4,5/5
Lo mejor: Michael Barbieri, la mejor interpretación de un niño es mucho tiempo.

Lo peor: Que mucha gente desconozca la existencia de este largometraje y se pierda semejante obra de arte.

martes, 8 de noviembre de 2016

Crítica de "El Contable"

La mayoría de películas de acción americanas siguen el mismo esquema, por lo que es bastante complicado hacer algo original y que no quede plano. “El Contable” es una cinta con grandes momentos de acción y con una trama que conseguirá atraparte desde el principio y que se aleja de la poca consistencia que tienen muchos thrillers estrenados en los últimos meses.
Para que conozcamos mejor la historia de Christian Wolff, personaje interpretado bastante bien por Ben Affleck, el film nos muestra en varias escenas intercaladas a lo largo de todo el metraje la dura infancia que tuvo de niño y el problema que posee. El guion es inteligente y sabe explotar muy bien sus virtudes. Provoca que el espectador conecte con un asesino despiadado y se haga partícipe de sus actos, además de lograr momentos bastante cómicos sin pretenderlo. Quizá, Wolff sea el personaje que mejor le ha sentado a Affleck en los últimos años. El director consigue convertir la enfermedad del protagonista, que padece Síndrome de Asperger, en un auténtico superpoder.
Una de las partes más interesantes de “El Contable” es la historia que se esconde detrás de los personajes de J.K. Simmons y Cynthia Addai-Robinson y la exhaustiva investigación que realiza esta última para encontrar al protagonista. Sin embargo, el personaje de Anna Kendrick no está del todo bien perfilado y no encaja con la misma brillantez que el resto, quedando ausente sin justificación en una parte de la película.

“El Contable” es un auténtico puzle de acción pero que comienza a complicarse en la segunda parte del film para intentar dotarlo de más inteligencia, pero lo que consigue es liar la historia. La obsesión del director por crear una obra con capacidad de sorpresa provoca que queden muchas cosas sin resolver y que el público no pueda ni intuir un giro final que no está a la altura del resto del largometraje. Además, el exceso de tramas y personajes secundarios convierte a “El Contable” en una cinta difícil de seguir.
Pese a algunos fallos, el último trabajo del director de “Warrior” es uno de los thrillers más sólidos de este año.

Valoración: 3,5/5
Lo mejor: Las escenas del protagonista de niño.

Lo peor: El guion juega a ser demasiado complicado.

martes, 1 de noviembre de 2016

Crítica de "La chica del tren"


No es ni la primera ni la última vez que un libro que ha sido éxito de ventas se lleve a la gran pantalla. En algunas ocasiones, el largometraje supera al papel pero, en la mayoría de ocasiones, la película es peor que el libro en el que se basa.
“La chica del tren” es una historia de suspense, de venganza, de traición y de amor. El principal problema de esta versión es que no consigue transmitir ninguna de las sensaciones que el libro produce. Es un film plano y aburrido, que no conecta con el espectador.

Su principal fallo es que no presenta a los personajes, por lo que es imposible identificarse o sentir una mínima empatía por ellos. En su comienzo no se establece quien es quien, lo que provoca que el espectador no entienda bien la historia hasta que el metraje está un poco avanzado.
La forma en la que está narrada, mezclando las historias, hacen que el público empiece a desconectar desde el principio. Además, sus continuos saltos temporales no ayudan nada a que la historia avance; al contrario, la entorpecen aún más.
“La chica del tren” cuenta con un reparto estupendo, encabezado por una brillante Emily Blunt, pero esto no es suficiente. Su guion es demasiado esquemático, predecible y se asemeja mucho a bastantes telefilmes que se emiten en la sobremesa del fin de semana. Es un crimen que se podría haber resuelto en media hora, no en 112 minutos que se hacen eternos y que pueden provocar que algún espectador cansado se eche una cabezadita.
La cinta tiene escenas muy largas y demasiados planos largos. Aunque no se parezcan en mucho, recuerda en bastantes momentos a “Perdida” (2014). Ambas son historias interesantes, con un trasfondo lleno de actualidad y que podría hacer reflexionar al espectador, pero en lugar de eso, optan por una narración plana y cuentan con un guion bastante pobre. Además, los momentos románticos o “subidos de tono” de “La chica del tren” no aportan nada en absoluto, ya que le añade sentimentalismo o pasión a algo que no pretende contar ni transmitir eso.

Valoración: 2/5
Lo mejor: Que los fans más incondicionales del libro puedan disfrutar de ella.

Lo peor: Su esquematismo y rigidez visual.