sábado, 29 de julio de 2017

Crítica de La Guerra del Planeta de los Simios: El adiós a uno de los mejores blockbusters de todos los tiempos

El cineasta Matt Reeves dirige la tercera entrega de la saga que comenzó en 2011, después de su gran éxito con “El Amanecer del Planeta de los Simios”. Una de las mejores cosas de esta trilogía es que cada filme ha sido mejor que el anterior. Primero se nos planteó cómo comenzó el origen de la revolución, después se nos cuenta cómo esto se extiende y, ahora, nos encontramos con una guerra capitaneada por César y su manada de simios.
Es un largometraje grande, y no me refiero a su amplia duración, que sobrepasa los 140 minutos. Cuenta con momentos épicos que son fantásticos para cerrar uno de los mejores blockbusters que nos ha dado Hollywood en los últimos años.
En “La Guerra del Planeta de los Simios” no solo hay acción. Se nos plantea una moraleja, una pesadilla hecha realidad. Los humanos han perdido el control, y esto ha sido por culpa de su falta de organización cuando estaban al mando. Woody Harrelson, uno de los pocos humanos que aparecen en escena, está sublime y logra dotar de emoción e inteligencia al metraje en su conjunto.
                                     Foto: ecartelera.com
La cinta tiene un tono bélico que sabe recopilar las mejores escenas de filmes de dicho género. La banda sonora de Michael Giacchino también ayuda notablemente a que los gestos y las acciones cobren gran sentido y emoción. Cada escena va acompañada de una melodía sublime que logra que el espectador se meta mucho más en la acción y se mimetice con el entorno que está visualizando.
Gracias a esta nueva saga del “Planeta de los Simios”, podemos decir que se ha hecho justicia con respecto a sus películas originales, y le ha dado sentido por primera vez a hacer versiones de grandes clásicos. Un blockbuster en mayúsculas que demuestra que lo comercial y lo que tiene calidad puede ir de la mano.
Valoración: 4/5

Lo mejor: Que se haya optado por un tono bélico y más oscuro

Lo peor: Su duración es un poco excesiva

sábado, 22 de julio de 2017

Baby Driver: Emoción a todo gas

No había ningún antecedente que pudiera predecirlo, pero el nuevo filme protagonizado por Edgar Wright se ha convertido en uno de los más sorprendentes de todo el año. "Baby Driver" es una espectacular aventura audiovisual sin frenos que pisa el acelerador a fondo desde el minuto uno. Técnicamente es brillante, y audiovisualmente sublime.
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Foto: Fotogramas.es

En sus anteriores trabajos, Edgar Wright ha demostrado que es un director que cuenta con un sinfín de referentes clásicos. Con "Baby Driver" se consagra como un cineasta peculiar y con un gran recorrido. En sus 113 minutos, la cinta protagonizada por Ansel Elgort  plantea una gran cantidad de ideas claras con un  montaje dinámico que supone puro entretenimiento. A priori, puede parecer un filme más dentro del género thriller, pero lo cierto es que nunca se ha visto nada igual.

Su protagonista, Ansel Elgort, al que sólo conocemos desde hace tres años que saltó a la fama gracias a "Divergente", demuestra que tiene un gran talento y una enorme versatilidad, que viene podría valerle una nominación al Oscar a este actor con madera de estrella. Además, tiene la suerte de contar con unos secundarios de lujo como son Kevin Spacey, Jamie Fox y Jon Hamm.

Otros de los factores que hacen que "Baby Driver" funcione es su espectacular banda sonora. Marchosa y cañera hasta decir basta, hará que el espectador se meta en la acción desde el minuto uno. El resultado final es un viaje trepidante, único y que te hará pasártelo en grande con unos de los largometrajes más rítmicos que jamás se han hecho nunca. Esperamos que Edgar Wright nos vuelva a regalar una película así de redonda en muy poco tiempo.

Valoración: 4,5/5

Lo mejor: Sus impactantes escenas hace que te impacte desde el minuto uno

Lo peor: Que se la califique de comercial cuando realmente es una apuesta minoritaria

sábado, 15 de julio de 2017

Crítica de Colossal: Monstruosa y brillante

Si te gustan las películas lógicas, con un orden narrativo correcto y sencillas, lo pasarás realmente mal viendo “Colossal”. Sin embargo, si la imaginativa narrativa es lo tuyo, el nuevo trabajo del director español Nacho Vigalondo, cuya anterior cinta fue “Open Windows” (2014), será una delicia para todos tus sentidos.
El filme cuenta con un argumento absurdo que es una mezcla entre el cine de ciencia ficción, el drama y la comedia más alocada. “Colossal” es el trabajo más redondo del director.
La cinta cuenta la historia de Gloria, interpretada de manera bastante correcta por Anne Hathaway, una chica con problemas con la bebida, cuyo novio rompe con ella. Enseguida, es acogida por Oscar (Jason Sudeikis), un amigo suyo de toda la vida.

                                                   Foto: Sensacine.com

“Colossal” explora un mundo fantástico. Nacho Vigalondo es, en parte, el Tim Burton español, solo que con mucha más imaginativa y con películas mucho más redondas que las del director estadounidense. Cuenta con un discurso personal bastante brillante que hará reflexionar a todo el espectador, y lo mejor de todo es que todo lo trata de una manera que parece bastante sencilla, cuando la realidad es bien distinta.
En cuanto a estética se refiere, la cinta es brutal. Desde que el monstruo irrumpe, el espectador se quedará fascinado con tanta belleza. Pese a que es algo irregular, ya que su segunda parte es bastante superior a la primera, la capacidad de sorpresa es bastante grande.
Vigalondo elabora un discurso en torno a la falta de control que es admirable, más propia de un filósofo que de un director de cine. “Colossal” hace algo fantástico que es que, guste o no guste, el espectador se quedará marcado y reflexionará un buen rato sobre las temáticas tan sorprendentes que ha tratado esta joyita audiovisual.

Valoración: 4,5/5
Lo mejor: La moraleja que esconde y la manera de tratar cada uno de los temas que explota.

Lo peor: Tiene partes que son bastante superiores a otras.

martes, 11 de julio de 2017

Las cinco películas más sorprendentes de lo que llevamos de año

Hace una semana, se hizo un repaso a los cinco largometrajes más decepcionantes de lo que llevamos de 2017. Ahora, analizamos los cinco filmes más sorprendentes de la temporada. ¿Echas alguno en falta?

Colossal:
El nuevo filme de Nacho Vigalondo planteaba muchas dudas. No se sabía si su argumento iba a sorprender o caería en lo ridículo. Como buen director que es, ha conseguido hacer el que es su filme más redondo. Diversión, acción y una contundente moraleja es todo lo que ocurre esta joyita que, aunque esté pasando desapercibida por la cartelera, no tiene desperdicio alguno.


Alien Covenant:
Con Prometheus, muchos fans del universo Alien se sintieron decepcionados. Era una película que prometía contar mucho, pero que se quedó a medio gas. Sin embargo, con su secuela pasa lo contrario. Algunos ya vieron colmadas todas sus esperanzas y, cuando se toparon con Alien Covenant, descubrieron que a Ridley Scott le queda todavía mucho que contar en el universo Alien.


Déjame Salir:
Este film es una obra de terror diferente, que explora el mundo psicológico y hace que el espectador se retuerza del miedo sin el tópico del susto fácil. Pese a que sus momentos de comedia son un poco prescindibles, es la mejor película de terror de lo que llevamos de año.


Z, la ciudad perdida:
Esta cinta de aventuras es una joya audiovisual en todos los sentidos. Está destinada a convertirse en un clásico. Sus actuaciones, la belleza de sus escenas y su propuesta original hacen de Z una de las mejores películas del año y una de las candidatas a arrasar en los próximos Oscar.


Verano 1993:
La ópera prima de Carla Simón es un viaje emocional y espiritual increíble. Emociona sin caer en lo melodramático. Las interpretaciones de las niñas son sublimes e impregnan de ternura. Una obra con una gran verdad detrás, que aparenta ser sencilla pero esconde un mundo complejo donde la emoción y la originalidad convierten a algo pequeño en una apuesta arriesgada y con autoridad suficiente.

viernes, 7 de julio de 2017

Crítica de Gru 3

Cuando en 2010 llegó a las pantallas “Gru: Mi villano favorito”, nadie podría pensar que se convertiría en una de las franquicias animadas más exitosas, y que generan una gran expectación.
Después de disfrutar hace dos años con el largometraje en solitario de Los Minions, que decepcionó a muchos de sus espectadores, llega la tercera parte de Gru, que podría cambiar su nombre a “Las aventuras de los Minions con compañía de Gru”, puesto que los personajes amarillos cobran cada vez más importancia y han pasado de ser secundarios a protagonistas.
Foto: Fotogramas.es

El film funciona a la perfección y aporta grandes dosis de humor. Situaciones cómicas, Minions en la cárcel y un sinfín de situaciones disparatadas. El problema es que al espectador le pueda dar la sensación de si no está viendo lo mismo por cuarta vez, y llegue a aburrirle. Es cierto que los 90 minutos de metraje son muy entretenidos y el público se quedará con ganas de más, pero no hay una evolución en su historia.
Todas las cintas del universo Gru siguen el mismo patrón. Se echa en falta un poco de innovación en ella. Al tener elementos que funcionan a la perfección, cada vez se hace más uso de los Minions y se deja menos lugar para la imaginación. Esto puede terminar pasándole factura, como ha ocurrido con la saga Ice Age, y que el público acabe por darle la espalda en entregas superiores al ser siempre lo mismo.
Gru 3 encantará a niños y divertirá a mayores. Hay escenas muy divertidas y el filme tiene más calidad que “Gru 2” (2013) o “Los Minions” (2015). Sin embargo, desde Illumination Entertainment tienen que aprender a innovar si no quieren que su producto estrella empiece a pasarles factura.

Valoración: 3,5/5
Lo mejor: Las intervenciones de Los Minions son más divertidas que nunca.

Lo peor: La falta de originalidad y el abuso de clichés.

martes, 4 de julio de 2017

Las cinco películas más decepcionantes de lo que llevamos de año

Ya han pasado los seis primeros meses de 2017 y multitud de estrenos han llegado a nuestra cartelera. Algunos de ellos han llegado a sorprender. Sin embargo, otros han decepcionado y se han convertido en una de las peores cintas de este año. Aquí recopilamos cinco películas que prometían mucho y que, de una manera u otra, han decepcionado fuertemente:

Capitán Calzoncillos: 
La segunda película que Dreamworks ha estrenado este año tenía los elementos necesarios para ser una comedia hilarante y que la compañía de animación se recuperara del desgaste que ha sufrido en los últimos años. Sin embargo, el resultado final fue una película infantil, no apta para mayores de diez años, y que consigue aburrir desde el minuto uno de su metraje. Además, su estética no ayuda para nada.
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Pieles:
Desde que se anunció que Eduardo Casanova iba a rodar su ópera prima, todos sabíamos que "Pieles" se iba a convertir en una de las películas más polémicas del año. Su director tenía dos opciones: que el público quedará prendado ante su creación o que se horrorizara hasta llegar a abandonar la sala. Pese a que cuenta con una legión de fans, "Pieles" es una de las peores películas que se ha estrenado en los últimos tiempos, aunque hay que reconocer que su producción está bastante cuidada y que sus interpretaciones y la dirección son muy buenas. Por tanto, es un problema de guion y de concepto, con una estética que acaba por chirriar.


Trainspotting 2:
La secuela de Trainspotting prometía ser uno de los eventos cinematográficos del año. Sin embargo, el espectador salía de la sala con la sensación de que le habían tomado el pelo. Parecía un homenaje a la película de 1996, una reunión de sus actores protagonistas que hacían recordar lo buena que era la primera parte, y lo innecesario que fue una secuela que no avanzó en sus tramas.


Piratas del Caribe 5:
Jack Sparrow inició sus aventuras en 2003, con una película intrépida y bastante entretenida. Sin embargo, sus secuelas no han sabido estar a la altura y cada una de ellas ha sido peor que la anterior. Con su quinta entrega, no logra resucitar y consigue caer en la monotonía y el aburrimiento más absoluto.


La Gran Muralla:
Zhang Yimou ha demostrado ser un gran director. Es por eso por lo que todo apuntaba que "La Gran Muralla" podía ser uno de los blockbusters con mayor calidad del año. En lugar de eso, se convirtió en un batiburrillo de efectos especiales y en una decepción absoluta.