lunes, 26 de diciembre de 2016

Crítica de "Vaiana"

Las navidades se están acercando, y no hay nada más típico en estas fechas que se estrene un nuevo largometraje de animación. Después de la divertidísima y original “Zootropolis”, Walt Disney vuelve a la carga con “Vaiana”, que tiene como protagonista a una chica, pero que se aleja de los típicos cuentos de princesas de la compañía, puesto que “Vaiana” es la historia de una heroína.
Basándose en mitologías y leyendas, la película es espectacular en cuanto a la animación se refiere. La perfecta construcción de escenarios como la playa o la arena harán que te adentres en la cinta y que te quedes alucinado con lo real que parece todo. Sin duda, Disney demuestra su poderío y consigue lo que ninguna compañía más de animación ha podido hacer todavía.

El problema de “Vaiana” radica en su argumento. Disney quería crear una historia nueva, que se alejara a todo lo que había hecho antes, pretendiendo innovar, pero lo que consigue es hacer un film plano, aburrido en algunas ocasiones y con cierta falta de ritmo. A los protagonistas les falta carisma y gracia, el espectador no consigue conectar con ninguno de ellos. Además, los personajes secundarios no aportan nada a la cinta, como es el caso del gallo que acompaña a “Vaiana” durante su aventura. Funciona como un buen gag al principio, pero se va debilitando hasta llegar al agotamiento, usándolo como recurso para poder provocar alguna carcajada al público.
La película gustará a los niños, puesto que se reirán con las situaciones que ocurren y pasarán un rato bastante entretenido, pero aburrirá al público mayor de 10 años puesto que, aunque no es habitual, en esta ocasión Disney solo ha pensado en los más pequeños de casa y nos ha presentado una historia menos elaborada de la que nos tienen acostumbrados.

Valoración: 2,5/5
Lo mejor: la belleza y perfección de su animación.

Lo peor: La falta de carisma de los personajes y el poco gancho que posee la historia.

miércoles, 21 de diciembre de 2016

Crítica de "Animales Nocturnos"

Crítica de “Animales Nocturnos”
La segunda película de Tom Ford como director cuenta con un reparto excelente y con una historia brutal que conseguirá que salgas del cine con mal cuerpo

En “Un hombre soltero” (2009), Tom Ford sorprendió con una historia brutal, emocionante y que, sin duda, dejó al espectador con ganas de más. Siete años después, el diseñador ha vuelto a las andadas con “Animales Nocturnos” que, pese a no parecerse nada a su anterior trabajo, tiene la misma capacidad de impacto.
Su nuevo trabajo, protagonizado por una Amy Adams pletórica y por Jake Gyllenhaal, es un relato oscuro que busca remover la conciencia del espectador. La película, entre otras muchas cosas, critica la sociedad actual, la moda y el arte moderno, tal y como queda reflejado en sus esperpénticos pero necesarios primeros minutos.

“Animales Nocturnos” cuenta con una gran capacidad de sorpresa y con ganas de engañar y hacer sufrir al espectador. El relato es bastante fuerte, y está lleno de secuencias bastante violentas y perturbadoras. Es un film que, sin duda, te hace pensar y reflexionar.
La manera en la que están intercaladas las dos historias que aparecen en el largometraje es brillante, y no te hace perder el hilo en ningún solo momento. Pese a que las secuencias que giran en torno al personaje de Amy Adams son fantásticas, las mejores escenas de la cinta son las que protagoniza Jake Gyllenhaal por su crudeza y su ritmo frenético y angustioso.
Lo que hace brillar a “Animales Nocturnos” no es solo su historia, puesto que cuenta con una estética muy pop y su diseño es impecable.
Quizá, el único fallo de la nueva película de Tom Ford sea que, a veces, juega a ser demasiado compleja y a complicarse más de lo debido, lo que hará que no guste a todo el mundo y que se le acuse de pretenciosa. Aun así, “Animales Nocturnos” logra ser un trabajo bastante completo y que te dejará con ganas de más.

Valoración: 4/5
Lo mejor: La historia que tiene a Jake Gyllenhaal como protagonista.

Lo peor: Que se la pueda acusar de pretenciosa.

viernes, 16 de diciembre de 2016

Crítica de Aliados: una forma de volver a creer en el cine comercial

Muchas veces se dice que el cine comercial no es de calidad y que está hecho con la mera finalidad de entretener. Esto no tiene por qué ser siempre así, y “Aliados” es una buena muestra de ello.
Robert Zemeckis vuelve a dirigir después de la correcta pero poco ambiciosa “The Walk” (2015). En esta ocasión, el director nos lleva hasta la II Guerra Mundial para contarnos una historia de pasión, de amor y de incertidumbre.
Pese a que su arranque es algo lento, “Aliados” tiene un ritmo frenético y consigue enganchar a todo tipo de espectador. El filme es una mezcla de películas ambientadas en la guerra con historias de amor que parecen muy bonitas, pero que en el fondo son complejas.

El largometraje funciona, en parte, gracias a la excelente química que hay entre sus dos protagonistas, Marion Cotillard y Brad Pitt, quienes derrochan pasión en todo momento. El espectador es consciente de la evolución de los personajes, de cómo la historia avanza y va ganando interés en cada momento. Lo que hace que “Aliados” sea buena no es la originalidad de su propuesta ni su historia, sino que lo brillante es la forma en la que está contada. Robert Zemeckis vuelve a hacernos emocionar y nos trae el que, probablemente, sea su mejor film en el siglo XXI.
Los efectos especiales que aparecen a lo largo de la película están muy bien conseguidos y, sin duda, se convierten en un punto más a favor de este trabajo. Los 124 minutos que dura “Aliados” son muy fluidos, y no provocará el aburrimiento del espectador en ningún momento, puesto que tiene un buen ritmo que va aumentando en cada escena y que culmina con unos diez últimos minutos brillantes. Sin duda, una obra muy recomendada para quienes piensan que no hay nada más allá del cine independiente.

Valoración: 4/5
Lo mejor: La excelente química entre Brad Pitt y Marion Cotillard.

Lo peor: Una cierta falta de ritmo en sus primeros quince minutos.

lunes, 12 de diciembre de 2016

Crítica de "Un traidor como los nuestros"

“Un traidor como los nuestros” se basa en la historia creada por John le Carré, famoso por la complejidad de sus relatos. El guion, de la mano de Hossein Amini intenta no pasarse de complicado, introduciendo muchas escenas explicativas y amenas.

El largometraje cuenta con un arranque brutal y estupendo. Después, su calidad va disminuyendo y se nos presenta como otro thriller policiaco más. El fallo de “Un traidor como los nuestros” es que no tiene nada que la distinga ni diferencie de otros trabajos del mismo género. También la historia se vuelve un poco complicada y difícil se seguir en algunos momentos.
Pese a esto, la cinta logra ser un producto digno y contar una historia bastante interesante y que puede conseguir que el espectador reflexione sobre la actualidad y la proveniencia de las riquezas.
El filme cuenta con un elenco estupendo, encabezado por unos magníficos Ewan McGregor y Naomie Harris, y seguidos de unos grandes Damian Lewis y Stellan Skarsgard. Lo que quizás funciona mejor de “Un traidor como los nuestros” es su componente humano, lo que mueve a sus protagonistas a llevar a cabo los actos. El sentimiento de amistad, unidad y familia están presentes a lo largo de toda la obra, y este es un factor bastante interesante.
La historia tiene algunos altibajos puesto que, en algunos momentos, la trama avanza de manera vertiginosa y, en otros, las situaciones se quedan algo estancadas y el guion es poco dinámico. También, en la parte final se produce un poco de previsibilidad y que provocará que el espectador más avispado sé de cuenta de lo que va a suceder antes de que finalice el metraje.
Pese a sus desigualdades, “Un traidor como los nuestros” es un relato interesante, bastante dinámico y con grandes interpretaciones.

Valoración: 3,5/5
Lo mejor: El dúo Ewan McGregor- Stellan Skarsgard

Lo peor: Que todo el largometraje se vea eclipsado por su espectacular comienzo

viernes, 9 de diciembre de 2016

Crítica de "La llegada"

Desde que en 2010 estrenó la impactante y maravillosa “Incendies”, Denis Villeneuve ha demostrado ser uno de los mejores directores del siglo XXI. En 2013 dio su salto a Hollywood, sin por ello perder la calidad, con la magnífica “Prisioneros”. El año pasado estrenó “Sicario” que, pese a estar dirigida fantásticamente y a tener secuencias muy buenas, no poseía la calidad a la que nos tiene acostumbrados.
Con “La llegada”, Villeneuve se sumerge en un terreno que no había tocado antes, la ciencia ficción. A pesar de ser un filme más comercial, nunca pierde su sello de autor. Con esta película, el director ha podido crear un nuevo mundo en la ciencia ficción. El largometraje es entretenido, interesante, muy emocionante y construido de manera impecable.

Vileneuve consigue algo muy difícil, y es que “La llegada” no nos recuerde a ningún otro filme de su género. La historia engancha desde el primer momento, y su guion es maravilloso. El dúo actoral formado por Amy Adams y Jeremy Renner es increíble. Ambos se salen con sus interpretaciones.
La película no es nada predecible y no cae en ningún tópico. El director juega a complicar la historia y hacerla todavía más emocionante. Los 116 minutos de metraje se pasan volando y, probablemente, te quedes con ganas de más.
A los seguidores de la ciencia-ficción, “La llegada” les va a encantar. Es muy superior a trabajos recientes similares, como “Gravity” (2013) o “Interstellar” (2014), largometrajes que ya son muy buenos de por sí. El único problema que puede traer este film es que a muchos espectadores no les gusta la historia y la puedan tachar de aburrida, puesto que no es una obra dirigida en su totalidad al público mayoritario. Si la gente busca ver algo tipo “Independence Day”, esta no es su película.
Después de “La llegada”, Villeneuve nos deja con muchas ganas de ver la secuela de “Blade Runner”, que él dirige y que parece ser que no va a defraudar.

Valoración: 4,5/5
Lo mejor: Su guion y su capacidad para contar cosas nuevas de un tema muy explotado.

Lo peor: Que al público mayoritario no les guste y que la tachen de aburrida.

viernes, 2 de diciembre de 2016

Crítica de "No culpes al karma de lo que te pasa por gilipollas"

Basado en la conocida novela de Laura Norton, “No culpes al karma de lo que te pasa por gilipollas” es el nuevo largometraje de María Ripoll protagonizado por Verónica Echegui, Álex García y David Verdaguer. El film parte de un buen material y tiene un notable guion, cargado de momentos hilarantes y bastante entretenidos.
Su principal problema radica en su ejecución. María Ripoll hace lo mismo que en “Ahora o nunca”, su anterior obra. A una buena historia le mete momentos innecesarios que restan calidad al producto final. “No culpes al karma de lo que te pasa por gilipollas” cuenta con un arranque estupendo, pero que se va debilitando poco a poco y que se va perdiendo por culpa de gags innecesarios.
En ciertas ocasiones, la película llega a ser algo aburrida y hace que el tiempo se pase muy lento, sobre todo en su tramo final.

En cuanto a los actores, hay que destacar el trabajo de unos impecables Álex García, Verónica Echegui y Alba Galocha. La química entre Álex García y Verónica Echegui sobrepasa la pantalla y provoca que seamos cómplices y vivamos intensamente esta historia de amor. Por otro lado, Jordi Sánchez (visto recientemente en “Cuerpo de Élite”) está demasiado exagerado, lo que causa que su personaje no sea demasiado creíble y que el espectador desconecte cuando sale en escena.

Por tanto, “No culpes al karma de lo que te pasa por gilipollas” es un film irregular, puesto que tiene un guion correcto, muy buenos momentos y escenas bastantes divertidas, como la del zoológico o la fiesta en casa de la protagonista, pero que se ve perjudicada por una dirección mejorable y por situaciones demasiado largas o que no aportan demasiado, como el viaje a China. Pese a esto, el largometraje es divertido y aceptable para pasar una buena tarde de fin de semana, aunque no está a la altura de la novela en la que se basa.

lunes, 28 de noviembre de 2016

Crítica de "Sully"

Crítica de “Sully”

En su último largometraje, Clint Eastwood nos transporta a una historia emocionante y humana con un Tom Hanks sobresaliente en su papel

La nueva película de Clint Eastwood cuenta la increíble historia del “Milagro en El Hudson”, suceso que ocurrió el 15 de enero de 2009, en el que el piloto Chelsey Burnett Sullenberg aterrizó un avión en el río Hudson sin que hubiese ninguna muerte.
El film cuenta con unos efectos especiales impresionantes y que harán que te metas mucho más en la cinta. Clint Eastwood busca, a través de su nuevo trabajo, que los espectadores reflexionen acerca de lo que ocurrió en este caso, de cómo a un hombre que salvó a 155 personas le acusan de no hacer lo correcto. El largometraje es una oda a la humanidad, a la bondad y a la manera tan mecánica pero poco humana de trabajar de la sociedad actual.
“Sully” alterna los momentos del accidente con lo sucedido después, y lo hace de una manera que engancha desde el primer momento hasta el último. No estamos ante un guion espléndido, pero sí que es lo mejor que ha hecho Eastwood desde “Gran Torino” (2008).

En la película sobresale una persona por encima del resto, y ese es Tom Hanks, quien nos ofrece una interpretación magistral. “Sully” es una cinta que huele al Óscar, no solo por su parte técnica, sino por su poder de contar la historia en una hora y media con toda precisión de detalles sin caer en el aburrimiento o en la monotonía. Eastwood podría haber caído en lo dramático o, incluso, en lo sensacionalista, pero sabe que es lo que le interesa al público saber de la historia.
Sin duda, el film tiene un cierto aroma a Vintage y recuerda a los largometrajes que se hacían años atrás y que tan bien funcionaban en la gran pantalla.

Valoración: 4/5
Lo mejor: Tom Hanks y sus efectos especiales.

Lo peor: Parece que Eastwood ha perdido su capacidad de sorpresa.

jueves, 24 de noviembre de 2016

Crítica de "100 metros"

“100 metros” es una película necesaria para hacer que más gente conozca la enfermedad esclerosis múltiple, y para descubrir una historia que es un gran ejemplo de superación y de lucha constante. Sin embargo, hay algunas cosas que no acaban de encajar en el nuevo largometraje dirigido por Marcel Barrena.
Si el film hubiese durado mucho menos, se habría contado lo más esencial y el resultado sería increíble. El problema de “100 metros” es que contiene muchas tramas innecesarias y que le restan calidad al producto final. Su principal fallo es que, el personaje interpretado por Karra Elejalde, es demasiado exagerado y consigue que las situaciones no sean muy creíbles en muchos momentos. El personaje de María de Medeiros no aporta nada a la trama y provoca que en las escenas en las que ella sale rocen el ridículo.

A pesar de la entrega y del gran esfuerzo que ha hecho Dani Rovira para interpretar a Ramón Arroyo, el actor malagueño está más acertado en los roles cómicos que nos tiene acostumbrados que en esta ocasión. Es destacable el gran trabajo que hace la brillante Alexandra Jiménez, donde demuestra, una vez más, sus dotes interpretativas y que puede hacer el papel que se proponga.
Las partes cómicas de “100 metros” son necesarias para quitarle dureza al asunto, y quizá esto sea uno de los puntos positivos de la cinta. También es muy interesante ver el cambio que sufre el personaje de Dani Rovira, y cómo el deporte le ayuda a volver ser feliz. Las escenas del protagonista en el hospital junto a otros enfermos de esclerosis múltiple son lo mejor del film, puesto que hacen emocionar al espectador y que comprueben las distintas claras que puede tener esta enfermedad.

Valoración: 2,5/5
Lo mejor: La interpretación de Alexandra Jiménez.

Lo peor: Su falta de ritmo en muchos momentos.

lunes, 21 de noviembre de 2016

Crítica de "Ouija: El origen del mal"

La película “Ouija” (2014), basado en el terrorífico y popular juego de Hasbro, se vendió como una cinta que daba bastante miedo, pero que resultó ser uno de esos trabajos que, en vez de asustar, provocan carcajadas por lo absurda que es su situación, protagonizada por unos adolescentes, siendo un recurso demasiado utilizado en los filmes de este género.
Sin embargo, con su secuela no pasa lo mismo. Pese a no aportar nada nuevo al cine de terror, “Ouija: el origen del mal”, cuenta una historia que poco tiene que ver con la anterior. Esta vez, la situación da bastante miedo y provoca escalofríos en muchos momentos, sobre todo en el último tramo del largometraje, marcado por un final inesperado y que deja al espectador intranquilo y con sensación de malestar. Estamos ante una rara situación, ya que la segunda parte supera con creces a la primera.
En esta ocasión, las imágenes son muchos más impactante y hay sobresaltos con más frecuencia. Bien es cierto que la idea es más propia de un cortometraje de 30 minutos, debido a que la película tiene muchas escenas de relleno. Quiere meter dramas familiares y situaciones amorosas que provocan que no se acabe de crear un clímax total de terror y que no haya momentos de tensión hasta que ha entrado en su mitad. El susto tarda en llegar, pero cuando aparece lo hace con fuerza y mucha.

“Ouija: el origen del mal” es una cinta bastante entretenida e ideal para pasar una tarde/noche de fin de semana, pero que no aporta nada nuevo. Si te gustan los filmes de miedo inteligentes y psicológicos, lo mejor será que no vayas a verla, puesto que lo único que busca es provocar el susto fácil del espectador a través de un guion que sobresale por encima de otros trabajos con características similares, como el de la reciente “Nunca apagues la luz”.

Valoración: 3/5
Lo mejor: Su inquietante final.

Lo peor: Pese a su intento, no aporta nada nuevo al cine de terror.

jueves, 17 de noviembre de 2016

Crítica de "Que Dios nos perdone"

El pasado 28 de octubre se estrenó en las salas españolas la segunda película de Rodrigo Sorogoyen, quien vuelve a ponerse detrás de las cámaras después de la excelente “Stockholm” (2013). Desde que salió su primer tráiler en abril de este año, prometía ser uno de los thrillers más impactantes de este año, y desde luego no estábamos equivocados. 2016 está siendo glorioso para el cine español, y “Que Dios nos perdone” se ha convertido en uno de los mejores films del año, cosechando excelentes críticas, pese a que algunos críticos, como Mirito Torreiro, la consideran demasiado sensacionalista. Además, se llevó en el Festival de San Sebastián el premio al mejor guion y se ha convertido en una de las favoritas de los próximos Goya.
Su principal éxito se debe a su estructura narrativa. Está relatada de una manera que, en ningún momento, parece que sea una historia de ficción. Los personajes y las situaciones que ocurren son muy realistas, hasta un punto que da miedo.
Su guion es impecable y que permite que te metas en la historia desde el primer momento y que no desconectes ni un solo segundo. Todo lo que ocurre es impredecible, no te puedes imaginar lo que va a suceder en la siguiente escena. A pesar de su extensa duración, 127 minutos, no le sobra ni un solo fotograma. Todo lo que rodea a “Que Dios nos perdone” es absolutamente imprescindible. Pese a que sus imágenes son bastante duras, desagradables y pueden incomodar al espectador más sensible, son necesarias, puesto que no se recrea en ellas y no las muestra sin justificación alguna.

Mención aparte se merece su brillante elenco. Roberto Álamo está sobresaliente, con un personaje bastante difícil con el que otros hubiesen caído en la exageración, pero que él defiende como buen profesional que es. Mención aparte se merece Antonio de la Torre quien, probablemente, se encuentre ante el mejor papel de su carrera, con una tartamudez perfecta y con la que se reafirma como uno de los grandes. Realmente, este año los académicos lo tienen muy complicado con él, puesto que su papel en “Tarde para la ira” también fue excelente, al igual que toda la obra en su conjunto.

Rodrigo Sorogoyen ha vuelto a demostrar que sus trabajos están llenos de calidad y nos ha dejado con muchas ganas de que estrene una nueva cinta pronto. A pesar de “Que Dios nos perdone” está pasando desapercibida por la taquilla, víctima de la resaca de la fiesta del cine, ha logrado convertirse en una película de obligada visión para todos los cinéfilos y que, con el tiempo, puede convertirse en un clásico. Una vez más, el cine español demuestra que los prejuicios que van asociados a él están más que injustificados, puesto que puede ofrecer títulos de calidad igual o superior a la de otros países.

Valoración: 4,5/5
Lo mejor: La interpretación de Antonio de la Torre y los personajes secundarios que aparecen en el film.
Lo peor: Que obras como estas sean escasas.

lunes, 14 de noviembre de 2016

Crítica de "Verano en Brooklyn"

Ira Sachs ha demostrado, en anteriores ocasiones, que sabe acercarse de una manera impecable a los conflictos que rodean a los personajes. Su visión es siempre tierna y sabia a la hora de ahondar en las desgracias que ocurren en la vida cotidiana.
El director de títulos como “El amor es extraño” (2014) nos regala otra obra maestra. Sachs demuestra que se puede hacer una gran película con muy poco y con una historia aparentemente sencilla que consigue complicarse y convertirse en una auténtica delicia. “Verano en Brooklyn” cuenta la historia de cómo los problemas y decisiones familiares acaban salpicando y afectando a dos pequeños que mantienen intacta su inocencia.
El largometraje logra transportarnos a nuestra infancia, a recordar a los primeros amigos que tuvimos y nuestras salidas a los 13 años de edad. Uno de sus puntos positivos es la brillante interpretación de los dos niños protagonistas, sobre todo la de un magistral Michael Barbieri que demuestra ser un gran actor y tener muchas posibilidades de cara a un futuro. Él es quien encabeza la que quizá sea la mejor escena de “Verano en Brooklyn”, donde demuestra sus habilidades en una divertida clase de interpretación.

La cinta, mediante un tono de comedia dramática, nos plantea la trágica historia de la pérdida de la inocencia a través de un conflicto entre las familias de Jake y Tony, los dos niños de la película, que pone en peligro su amistad. A través de un guion excelente firmado por su propio director y Mauricio Zacharias, Sachs nos cuenta una historia de una forma en la que no resulta deprimente, haciendo que nos enamoremos de algunos personajes y nos desencantemos de otros y consiguiendo que el espectador se plantee si algunas decisiones merecen realmente la pena.

Valoración: 4,5/5
Lo mejor: Michael Barbieri, la mejor interpretación de un niño es mucho tiempo.

Lo peor: Que mucha gente desconozca la existencia de este largometraje y se pierda semejante obra de arte.

martes, 8 de noviembre de 2016

Crítica de "El Contable"

La mayoría de películas de acción americanas siguen el mismo esquema, por lo que es bastante complicado hacer algo original y que no quede plano. “El Contable” es una cinta con grandes momentos de acción y con una trama que conseguirá atraparte desde el principio y que se aleja de la poca consistencia que tienen muchos thrillers estrenados en los últimos meses.
Para que conozcamos mejor la historia de Christian Wolff, personaje interpretado bastante bien por Ben Affleck, el film nos muestra en varias escenas intercaladas a lo largo de todo el metraje la dura infancia que tuvo de niño y el problema que posee. El guion es inteligente y sabe explotar muy bien sus virtudes. Provoca que el espectador conecte con un asesino despiadado y se haga partícipe de sus actos, además de lograr momentos bastante cómicos sin pretenderlo. Quizá, Wolff sea el personaje que mejor le ha sentado a Affleck en los últimos años. El director consigue convertir la enfermedad del protagonista, que padece Síndrome de Asperger, en un auténtico superpoder.
Una de las partes más interesantes de “El Contable” es la historia que se esconde detrás de los personajes de J.K. Simmons y Cynthia Addai-Robinson y la exhaustiva investigación que realiza esta última para encontrar al protagonista. Sin embargo, el personaje de Anna Kendrick no está del todo bien perfilado y no encaja con la misma brillantez que el resto, quedando ausente sin justificación en una parte de la película.

“El Contable” es un auténtico puzle de acción pero que comienza a complicarse en la segunda parte del film para intentar dotarlo de más inteligencia, pero lo que consigue es liar la historia. La obsesión del director por crear una obra con capacidad de sorpresa provoca que queden muchas cosas sin resolver y que el público no pueda ni intuir un giro final que no está a la altura del resto del largometraje. Además, el exceso de tramas y personajes secundarios convierte a “El Contable” en una cinta difícil de seguir.
Pese a algunos fallos, el último trabajo del director de “Warrior” es uno de los thrillers más sólidos de este año.

Valoración: 3,5/5
Lo mejor: Las escenas del protagonista de niño.

Lo peor: El guion juega a ser demasiado complicado.

martes, 1 de noviembre de 2016

Crítica de "La chica del tren"


No es ni la primera ni la última vez que un libro que ha sido éxito de ventas se lleve a la gran pantalla. En algunas ocasiones, el largometraje supera al papel pero, en la mayoría de ocasiones, la película es peor que el libro en el que se basa.
“La chica del tren” es una historia de suspense, de venganza, de traición y de amor. El principal problema de esta versión es que no consigue transmitir ninguna de las sensaciones que el libro produce. Es un film plano y aburrido, que no conecta con el espectador.

Su principal fallo es que no presenta a los personajes, por lo que es imposible identificarse o sentir una mínima empatía por ellos. En su comienzo no se establece quien es quien, lo que provoca que el espectador no entienda bien la historia hasta que el metraje está un poco avanzado.
La forma en la que está narrada, mezclando las historias, hacen que el público empiece a desconectar desde el principio. Además, sus continuos saltos temporales no ayudan nada a que la historia avance; al contrario, la entorpecen aún más.
“La chica del tren” cuenta con un reparto estupendo, encabezado por una brillante Emily Blunt, pero esto no es suficiente. Su guion es demasiado esquemático, predecible y se asemeja mucho a bastantes telefilmes que se emiten en la sobremesa del fin de semana. Es un crimen que se podría haber resuelto en media hora, no en 112 minutos que se hacen eternos y que pueden provocar que algún espectador cansado se eche una cabezadita.
La cinta tiene escenas muy largas y demasiados planos largos. Aunque no se parezcan en mucho, recuerda en bastantes momentos a “Perdida” (2014). Ambas son historias interesantes, con un trasfondo lleno de actualidad y que podría hacer reflexionar al espectador, pero en lugar de eso, optan por una narración plana y cuentan con un guion bastante pobre. Además, los momentos románticos o “subidos de tono” de “La chica del tren” no aportan nada en absoluto, ya que le añade sentimentalismo o pasión a algo que no pretende contar ni transmitir eso.

Valoración: 2/5
Lo mejor: Que los fans más incondicionales del libro puedan disfrutar de ella.

Lo peor: Su esquematismo y rigidez visual.

lunes, 24 de octubre de 2016

Camino a los Goya 2017

Pese a que quedan tres meses y medio para los próximos premios de la academia de cine española, que se celebrarán el 5 de febrero de 2017, este año se han estrenado ya muchas películas que pueden hacerse un hueco en la próxima edición.

Julieta
Pese a que Pedro Almodóvar es un director ninguneado en nuestro país, todo parece apuntar que “Julieta”, su último trabajo, va a estar muy presente este año. Después de sus excelentes críticas y la vuelta del director manchego al cine de calidad después de la malograda “Los amantes pasajeros”, su último trabajo podría optar a las candidaturas a la mejor película, dirección, guion adaptado, fotografía y pudiendo hacer un doblete con sus dos actrices, unas estupendas Emma Suárez y Adriana Ugarte.


Tarde para la ira
Para muchos es la sorpresa española del año. El primer trabajo de Raúl Arévalo tras las cámaras ha tenido una recepción casi unánime en cuanto a críticas positivas se refiere. Todo parece apuntar que el Goya a la mejor dirección novel para Raúl Arévalo está casi asegurado. Además, sería justo que estuviese nominada a mejor película, guion original y a mejor actor para un excelente Antonio de la Torre.


El hombre de las mil caras
Alberto Rodríguez es uno de los directores de cine más queridos por los académicos en la actualidad. Si tenemos en cuenta el éxito que tuvo en los Goya su anterior trabajo, “La isla mínima”, todo indica que es probable su candidatura a mejor película, dirección, guion adaptado, mejor actor principal para Eduard Fernández y mejor actor secundario para un desconocido Carlos Santos.



Un monstruo viene a verme
Pese a tener a la crítica un tanto dividida, la nueva aventura de J.A. Bayona puede arrasar en los Goya. La cinta se asegura estar nominada a los mejores efectos especiales, además de poder optar a la mejor película, mejor dirección, mejor guion adaptado e, incluso, no sería sorprenderte ver a Felicity Jones como mejor actriz de reparto.



Que Dios nos perdone
Después de arrasar en el festival de San Sebastián, no sería extraño que el nuevo largometraje de Rodrigo Sorogoyen optase a llevarse el premio a la mejor película, mejor dirección, mejor actor principal para Roberto Álamo o Antonio de la Torre, y mejor guion original.


Cien años de perdón
Pese a que se estrenó a principios de año y ha podido caer en el olvido, este trabajo podría estar nominado a mejor montaje, mejor sonido o a mejor actor revelación para Rodrigo de la Serna.


La próxima piel
Después de pasar con mucho éxito por el Festival de Málaga, la nueva película de Isaki Lacuesta le podría valer a Álex Monner o a Emma Suárez una nominación.



Ozzy
La nueva película animada de Alberto Rodríguez (no es el mismo que el responsable de El Hombre de las mil caras) tiene el Goya casi asegurado al mejor film animado.




sábado, 15 de octubre de 2016

Crítica de "La Fiesta de las Salchichas"

2016 está siendo un año monótono cinematográficamente hablando. La originalidad y las buenas ideas escasean, viendo una y otra vez lo mismo. “La Fiesta de las Salchichas” parece la típica comedia soez sin mucha gracia que pretende entretener sin más. Sin embargo, es mucho más.
La película tiene de base ideas parecidas a las de “Toy Story” pero con otros protagonistas, donde vemos a varios alimentos que intentan salvarse y evitar que se los coman. El film intenta, en cierto modo, burlarse de otros trabajos animados, pero consigue crear una historia propia que va más allá del puro entretenimiento.
“La Fiesta de las salchichas” es inteligente, llena de guiños y de chistes ingeniosos. Cada minuto del metraje es aún mejor que el anterior y los 85 minutos que dura están muy bien aprovechados, aunque te sabrá a poco.

Sin duda, la cinta se puede convertir en un hito en la historia de la animación, mezclando violencia, sexo, palabrotas, chistes sobre religión y lo más irreverente que se te pueda pasar por la cabeza. El contacto de los alimentos con un humano y el momento de la pizza y del papel higiénico es la mejor escena de la película junto a la que la comida descubre lo que realmente pasa con ellos.
Pese a no ser brillante, la animación de “La Fiesta de las salchichas” es la adecuada para este largometraje, con un perfecto diseño de los personajes, sobre todo el de panecillo y el de las salchichas, que en algunos momentos llega a ser un poco asqueroso.
Si quieres vivir una experiencia diferente y contemplar una de las comedias más originales del año, tienes que ir a ver este largometraje que, a pesar de pasarse de irreverente y tener algunos momentos demasiados excesivos, te harán pasar un rato bastante agradable. Eso sí, no se te ocurra llevar a tus hijos a esta fiesta porque no es nada apta para los niños.

Valoración: 3,5/5
Lo mejor: la originalidad de su propuesta

Lo peor: en muchos momentos peca de irreverente y soez.

sábado, 8 de octubre de 2016

Crítica de "El hogar de Miss Peregrine para niños peculiares"

Tim Burton siempre ha demostrado ser un director peculiar y diferente. Sus películas se suelen caracterizar por sus ambientaciones oscuras y góticas. En esta ocasión, nos ofrece una obra superior a sus anteriores trabajos, basada en el libro de Ransom Riggs, aunque sigue dando la impresión de que utiliza el piloto automático en vez de su impulso creativo, y es Burton siempre sigue el mismo esquema en sus películas, dando la sensación de que vemos lo mismo una y otra vez.
En el siglo XXI no nos ha brindado largometrajes de calidad como “Eduardo Manostijeras” (1990) o “Batman vuelve” (1992), estrenando algunos títulos como “Alicia en el país de las maravillas” (2010) o “Big Eyes” (2014), que están entre lo peor de su filmografía.
“El hogar de Miss Peregrine para niños peculiares” es una cinta que encaja perfectamente en el mundo de Burton, con una historia muy entretenida, llena de imágenes impactantes y bellas, pero que se desvanece en el segundo tramo del metraje después de un espectacular arranque. Aun así, es una gran fantasía que gustará tanto a niños como a mayores, con momentos muy divertidos. En muchos momentos recuerda a la correcta “Sombras tenebrosas” (2012), aunque esta es mejor en cuanto a términos visuales se refiere que la película protagonizada por Johnny Depp.

La mayoría de personajes que aparecen en el largometraje están llenos de carisma, lo que hace que disfrutemos con todos los niños que habitan en el hogar de Miss Peregrine. Lo que peor funciona es el personaje de Samuel L. Jackson ya que, desde que se incorpora a la trama, la cinta pierde interés, con unas aportaciones narrativas que no acaban de encajar.
Burton intenta no ser del todo fiel a la obra en la que basa y, con tal de aportar su estilo sea como sea, se desvía un poco de la trama inicial y no consigue que sea tan interesante como debería. Además, el largometraje deja algunos cabos sueltos y, en su tramo final, se echa bastante de menos a Miss Peregrine, interpretada por una excelente Eva Green, quien se metamorfosea en pájaro silencioso.
A pesar de esto, “El hogar de Miss Peregrine para niños peculiares” es una cinta recomendable, entretenida y con un brillante metraje inicial que recuerda mucho a los inicios del director estadounidense.

Valoración: 3,5/5
Lo mejor: su secuencia inicial.

Lo peor: que la película cambie de rumbo a partir de la aparición de Samuel L. Jackson.

sábado, 1 de octubre de 2016

Crítica de "El hombre de las mil caras"

Después de arrasar con “La isla mínima” (2014), Alberto Rodríguez nos presenta en su nuevo trabajo la historia del espía Francisco Paesa desde que conoce a Luis Roldán, el prófugo más buscado de la democracia española. Es mejor ir al cine conociendo algo de esta historia para poder disfrutar de la película aún más.
El argumento de “El hombre de las mil caras” puede parecer, a priori, bastante denso, pero Rodríguez consigue que su resultado final sea brillante debido a su perfecta ejecución, a la calidad del guion y a unos actores brillantes, destacando los trabajos de Eduard Fernández, probablemente el mejor de su carrera, y el de Marta Etura.
El largometraje supone un cambio de registro para el director sevillano, puesto que no se parece a nada de lo que ha hecho antes. La brillantez con la que está construida el personaje de Luis Roldán (Carlos Santos), provoca que el espectador logre empatizar con él y vivir más intensamente este relato,
A pesar de durar 123 minutos, “El hombre de las mil caras” no decae en ningún solo momento, lo que demuestra que Rodríguez es un perfecto narrador y que sabe mezclar muy bien los géneros cinematográficos, consiguiendo en todo momento un clímax de suspense e intriga. Esto demuestra que no se necesitan grandes dosis de acción para que una cinta tenga un ritmo trepidante.

Un recurso brillante del film es incluir la voz en off del personaje de José Coronado para narrar los acontecimientos. Esto le aporta dinamismo y más ritmo a la trama. Su único fallo es incluir algunos momentos de relleno y que no aportan demasiado a la trama, pero que queda camuflado por la buena ejecución de toda la película.
“El hombre de las mil caras” busca la reflexión del espectador, con unas piezas encajadas perfectamente que provocan que su resultado sea bastante bueno y que, debido a su forma de narrar, logra que el espectador contemple la obra con objetividad y que no se posicione con ninguno de sus personajes. Habrá que esperar para ver si el último trabajo de Rodríguez sigue los pasos de “La Isla Mínima” pero, si el público es justo, todo parece indicar a que el director sevillano volverá a dejar huella en el cine español de 2016.

Valoración: 4/5
Lo mejor: su impecable guion y Eduard Fernández.

Lo peor: incluir algunas escenas de relleno.

lunes, 26 de septiembre de 2016

Crítica de "Tarde para la ira", una de las mejores películas españolas del año

Los thrillers de persecuciones están muy de moda en el cine español. Parece que ya está todo contado y que es un tanto difícil innovar. Raúl Arévalo sigue los pasos de actores como Leticia Dolera y se pone manos a la dirección con una de las mejores óperas primas que se han hecho nunca.
“Tarde para la ira” es una historia de venganza innovadora, contada como si de un documental se tratara, estructurado en varios episodios, con un guion escrito excelentemente y con una estupenda construcción de los personajes. Lo mejor es llegar al cine sabiendo lo menos posible de la película para que te pueda sorprender y te quedes alucinado con la historia, que consiste en el triángulo que se crea entre una mujer, su marido que acaba de salir de la cárcel y un tercer hombre que guarda un secreto y es lo que le une a los otros dos personajes.

El elenco del film no podría haber sido mejor. A Antonio de la Torre le viene como anillo al dedo su personaje, brindándonos uno de los mejores papeles de su carrera y, sin duda, debe ser premiado por ello. Luis Callejo no se queda atrás y nos ofrece una gran actuación, lo que hace que nos metamos muchísimo en la historia y que la vivamos intensamente. Ruth Díaz supone un enorme descubrimiento, siendo un enorme pilar en esta historia de venganza. Mención especial para Manolo Solo que, aunque puede ser el gran olvidado del largometraje, su corta aparición es brillante.
La cinta es sencilla en su construcción, y sus escenas en los barrios difíciles hacen que la historia sea aún más creíble y dura. Los 88 minutos de la película se hacen demasiado cortos y, sin duda, nos dejan con ganas de que Raúl Arévalo dirija un nuevo filme muy pronto, ya que con “Tarde para la ira” ha arrasado y espero que se imparta justicia y triunfe en la próxima edición de Los Goya, Todo a su debido tiempo.

Valoración: 4,5/5
Lo mejor: su potente guion y la interpretación de Antonio de la Torre.

Lo peor: que pase desapercibida y no cobre la importancia que merece.

lunes, 19 de septiembre de 2016

Crítica de "Cuerpo de Élite": una peli absurda pero muy divertida

La comedia española alocada está de moda. En los últimos años, Javier Ruiz Caldera ha puesto de moda este género con las disparatadas y brillantes “Spanish Movie” (2009), “Promoción fantasma” (2012), “3 bodas de más” (2013) y la menor “Anacleto: Agente secreto” (2015).
En esta ocasión, Joaquín Mazón es el encargado de dirigir esta comedia que cuenta con un reparto de lujo, encabezado por el versátil Miki Esparbé. “Cuerpo de Élite” no es una gran película. Su historia es floja y cae demasiado en los tópicos, aunque funciona muy bien a la hora de meter sus chistes y gags, que provocan risas continuas en el espectador. La parte de acción es más floja de lo esperado, debería ser más potente y estar mejor metida en el guion. Además, cuenta con más efectos especiales de lo necesario, ya que hay demasiadas explosiones.
Sin duda, la gran sorpresa del film es el personaje de Juan Carlos Aduviri, que saca varias carcajadas cada vez que sale en pantalla. También está muy bien construido el personaje de Andoni Agirregomezkorta, aunque hay un abuso desmesurado de clichés en él, al igual que en el personaje de María León, que no luce tanto como debería debido a un acento y personalidad andaluza demasiado exagerado y sin ninguna gracia.
La cinta presenta partes ingeniosas que no tienen nada que envidiar a las comedias estadounidenses, además de contar con secundarios de lujo como Carlos Areces, Joaquín Reyes y César Sarachu. Este último puede que sea el mejor personaje de todo el film, puesto que en la parte en la que aparece se puede considerar como lo más redondo del largometraje. Sin embargo, el papel de la gran Silvia Abril es lo peor de la cinta, puesto que el personaje de la catalana es muy exagerado y saca totalmente de contexto, ya que las situaciones en las que aparece son más absurdas de la cuenta.

Valoración: 3/5

Lo mejor: sus gags y el personaje de Juan Carlos Aduviri.

Lo peor: la poca potencia de su historia y caer demasiado en los tópicos.

sábado, 10 de septiembre de 2016

Sin aliento, sin respiración

Fede Álvarez debutó en el mundo del cine en 2013 con el remake de “Posesión Infernal”. El director demostró en este filme su capacidad de poner los pelos de punta al espectador, aunque la cinta era demasiado gore y, al ser una versión, no dejaba mostrar al uruguayo toda su capacidad imaginativa.
Tres años más tarde ha vuelto a ponerse tras las cámaras con “No Respires” que poco tiene que ver con su anterior trabajo. La película se presenta como un largometraje de terror, género demasiado explotado y que cada vez provoca menos expectación y sorpresa, ya que parece contar una historia que hemos visto muchas veces.
Sin embargo, el gran acierto de Álvarez es intentar desviarse del cine gore y de horror para ofrecernos un thriller psicológico y de supervivencia, que no tiene nada que envidiar a directores como Hitchcock, que logró hacer auténticas joyas de suspense. Pese a su arranque algo lento y que va encaminado a ser otra cinta de terror más, su potente guion y la gran interpretación de Stephen Lang (Avatar), hace meternos en la situación y lograr escenas angustiosas, claustrofóbicas y totalmente inesperadas. Su principal logro es conseguir que, al principio, sintamos pena por el indefenso ciego que va a ser víctima de un robo y que nos saquen de quicio el trío que va a cometer este acto para que, minutos después, recemos por la vida de los tres jóvenes y deseemos que el personaje de Stephen Lang salga lo peor parado posible.

El largometraje tiene una temática bastante actual, partiendo de la desigualdad de las clases sociales y mostrando a una especie de Robin Hoods que roban a aquellos que tienen demasiado para sacar su vida y la de sus familiares para adelante.
“No respires” te deja sin aliento y con ganas de más. Tiene los toques justos de violencia, sin caer en lo gore y desagradable. El sonido y el silencio juegan un papel fundamental a lo largo de toda la película, evitando ciertos clichés. La historia avanza a un ritmo imparable sin permitir el aburrimiento del espectador.
Narrativamente parecía sencilla, pero gracias a su inteligencia y a su acabado casi perfecto, Fede Álvarez ha puesto el listón muy alto, haciendo que esperemos con deseo su nuevo trabajo y consiguiendo que “No Respires” sea una de las mejores películas de lo que va de año.


Valoración: 4/5
Lo mejor: su inteligencia y su capacidad de sorpresa.
Lo peor: que sus primeros 15 minutos no sean tan brillantes como el resto del filme.


miércoles, 31 de agosto de 2016

La nueva película de Star Trek no va "más allá" y es menos ambiciosa que las dos entregas anteriores

Desde que la saga “Star Trek” volvió de la mano de J. J. Abrams en 2009, ha demostrado ser uno de los blockbusters de mayor calidad en estos últimos años. La primera película de esta nueva franquicia es uno de los mejores filmes de ciencia-ficción que se han hecho, rozando la brillantez. En 2013, Abrams volvió a ponerse detrás de las cámaras con “Star Trek: en la oscuridad” y, aunque el resultado fue bueno, no estaba al nivel de la primera entrega, a pesar de contar con Benedict Cumberbatch, un villano perfecto.

En “Star Trek: más allá”, se nota la ausencia de Abrams y la nueva incorporación de Justin Lin como director. El largometraje comienza muy bien y consigue atrapar durante todo el metraje, aunque hay algunas cosas que fallan. Se echa de menos ver a los personajes de la USS Enterprise más unidos ya que, en su lugar, están muy dispersos durante toda la cinta y no se le da especial importancia a ninguno de ellos. Estaría bien que el Capitán Kirk (Chris Pine) hubiese cobrado más protagonismo, y que se profundizase más en la relación entre los personajes de Spock (Zachary Quinto) y Nyota Uhura (Zoe Saldana) quien tiene un papel muy secundario y es la gran olvidada del film.
En esta nueva entrega, algunas escenas de Scotty (Simon Pegg) son demasiado largas, notándose que el actor es uno de los guionistas de la película y que lo ha hecho para su lucimiento. Otro problema es Jaylah (Sofía Boutella), el nuevo personaje que aparece en el film, ya que no logra ganarse el cariño del espectador y su excesivo maquillaje echa un poco para atrás.
“Star Trek: más allá” también tiene sus partes positivas. El villano de esta entrega, interpretado por Idris Elba, está a la altura y aporta mucha acción al filme. Todos los actores están impecables y el guion está escrito para no provocar el aburrimiento del espectador. Los efectos especiales son excelentes y no defraudará para nada a los Trekkies.

Valoración: 3/5
Lo mejor: su guion y los efectos especiales.

Lo peor: la poca importancia que cobra el personaje de Zoe Saldana y el maquillaje de Sofía Boutella.

miércoles, 24 de agosto de 2016

Crítica de "Secuestro": demasiados elementos en un filme que se queda a medio camino

La nueva película de Mar Targarona pretende hacer una crítica social a través del personaje de Blanca Portillo, una abogada rica con mucho prestigio y que su vida da un giro de 180 grados cuando su hijo, interpretado magistralmente por Marc Domenech, dice haber sido secuestrado. A partir de ahí, la madre está dispuesta a desafiar todos los límites de la ley con tal de proteger a su pequeño. La cinta busca emular el thriller y suspense de la sobresaliente “El Cuerpo” (2012) y la denuncia a la sociedad actual de “El desconocido” y “Cien años de perdón”, aunque no consigue ni una cosa ni la otra. El filme tiene dos partes: la primera de ellas cuenta con un gran suspense y una historia que atrapa pero, una vez descubierta la principal trampa del guion a través del uso de falsos flashbacks, recurso muy polémico en cine y que usó por primera vez Hitchcock en “Pánico en la escena” (1950), la película decide adentrarse en una crítica a la actualidad dejando de lado todo el clímax de tensión creado en sus primeros tres cuartos de hora. Este cambio de rumbo provoca que al espectador le dé la sensación de que está contemplando dos historias diferentes. Desde que aparece el personaje de José Coronado, todo empieza a tambalearse, convirtiéndose en un thriller policial sin alma.

El principal fallo de “Secuestro” es que su historia está llena de casualidades, funciona como una fórmula matemática, en la que una cosa ocurre porque otra ha sucedido anteriormente. El guion está demasiado hilado, cogido con pinzas y estudiado en cada milímetro para que no haya probabilidad de fallo y se consiga el resultado propuesto. Sin embargo, esta rigidez perjudica al film y lo convierte en un cálculo matemático mal ejecutado. La idea es bastante buena y cuenta con muy buenas interpretaciones, sobre todo la de Blanca Portillo, tan camaleónica como siempre y que demuestra que es una de las mejores actrices de este país y la del estupendo Marc Domenech, que hace recordarnos lo injusto que es que los menores de 16 años no puedan ser nominados a los Premios Goya, pero el nuevo trabajo de Mar Targarona se debería de haber planteado de otra manera para realmente conseguir lo que se propone y remover la conciencia del espectador. Se echa de menos más suspense y más espontaneidad.

Valoración: 2,5/5

Lo mejor: el personaje de Macarena Gómez y las actuaciones de Blanca Portillo y Marc Domenech.

Lo peor: la rigidez de su guion y la pérdida de interés en su segunda parte.

viernes, 19 de agosto de 2016

Lo que el verano 2016 se llevó: 5 sorpresas y 5 decepciones

El verano 2016 ha estado cargado de grandes estrenos y muchos blockbusters. Algunos han superado con creces mis expectativas, mientras que otros han supuesto una gran decepción. En este artículo recopilo cinco filmes que me han gustado mucho más de lo que pensaba y otros cinco que no han ofrecido lo que se esperaba de ellos.

5 largometrajes sorprendentes del verano 2016.

-       “Buscando a Dory”: esta secuela de Pixar generó mucha expectación, al igual que diversas dudas, ya que no se sabía si iba a estar a la altura de la original. Al final, el filme cumplió todas las expectativas, con una historia llena de momentos emotivos y con secundarios de lujo y que, para mí, supera a “Buscando a Nemo”. Además, “Piper”, el corto que le acompaña, es uno de los mejores que ha hecho últimamente la compañía de animación.



-       “Election, la noche de las bestias”: James DeMonaco está consiguiendo algo muy difícil, que es que cada entrega de esta trilogía sea aún mejor. “The Purge”, la primera entrega, tenía un buen planteamiento pero una pobre ejecución, “Anarchy” era bastante interesante y con “Election”, DeMonaco ha demostrado que a la saga más hardcore de todos los tiempos le queda todavía mucho más que ofrecer.



-       “Infierno Azul”: a pesar de no ser una gran película, el nuevo trabajo de Jaume Collet-Serra ha sido de los estrenos más entretenidos de este verano, en el que hemos podido comprobar lo buena actriz que es Blake Lively y la capacidad del director de mantener la atención del espectador a través de un único escenario.



-       “Malas Madres”: esta cinta tenía pinta de ser la típica comedia que no hace ninguna gracia. Sin embargo, debido a su disparatado guion y a las increíbles cosas que suceden en ella la convierten en una de las películas más divertidas del año.



-       “Mascotas”: el nuevo trabajo de Illumination Entertainment vuelve a demostrarnos lo que ya sabíamos: la increíble capacidad de esta compañía de animación para crear largometrajes locos y que provoquen la risa a todo tipo de público. Sin duda, “Mascotas” es el filme de animación más divertido que se ha hecho nunca.



5 largometrajes decepcionantes del verano 2016.

-       “Todos queremos algo”: el nuevo trabajo de Richard Linklater es, probablemente, la peor película que ha hecho el director. Después de títulos tan buenos como “BoyHood” o “Bernie”, Linklater nos ofrece una cinta carente de guion que lo único que presenta es la loca vida universitaria estadounidense en los años 80 sin aportar nada nuevo.


-       “Independence Day: Contraataque”: la secuela de la exitosa película de 1996 ofrece personajes sin alma, situaciones aburridas y escenas ridículas. Sin duda, es un largometraje innecesario y que está a años luz de la primera entrega.



-       “Mi amigo el gigante”: después de “El puente de los espías”, una de las cintas más aclamadas de su filmografía, Spielberg nos cuenta una historia que busca parecerse a ET pero que resulta ser muy infantil, ñoña y demasiado aburrida para haber salido de la mente de Spielberg.



-       “Un espía y medio”: el largometraje pretende ser una comedia de acción, pero lo que consigue es ser una de las peores películas de lo que llevamos de año, con nada de gracia y situaciones que sobrepasan lo ridículo.


-       “Escuadrón Suicida”: desde que salió el primer tráiler, todos esperábamos con muchas ganas el nuevo trabajo de DC, ya que parecía que se iba a convertir en uno de los mejores filmes de superhéroes de todos los tiempos. Al final, el largometraje ha resultado ser una tomadura de pelo, sin gracia y que para nada ofrecía lo que prometía, con personajes que podrían haber dado mucho más y con un Jóker totalmente desaprovechado. Warner ha conseguido lo imposible: “Escuadrón Suicida” es aún peor que “Batman vs Superman”, y eso ya es decir.